Todo artista es en esencia un provocador, y sin duda, un fuerte exponente de esta afirmación es Banksy. El es reconocido mundialmente como graffitero, pero nos parece más acertado definirlo como un interventor visual, que con su ironía deja en evidencia las falencias de un sistema enceguecido por el poder.
No se conoce mucho sobre él más que su arte irreverente, su identidad es un misterio, solo se supone que nació en 1975 en Bristol, Inglaterra, donde se concentra la mayor parte de sus intervenciones.
Tiene varios libros publicados con fotografías de sus obras, pintó murales en varias ciudades del mundo, hizo instalaciones y logró introducir obras suyas en importantes museos de manera clandestina, como una pintura de arte rupestre en el Museo Británico, en el que una figura humana empuja un carrito de supermercado.
En el 2006 cambió de las disquerías más de 500 cds de Paris Hilton, por unos con música hecha por el, fotografías manipuladas y en el arte de tapa decía, "Album debut ¿Por qué soy famosa? ¿Qué he hecho yo? ¿Para qué sirvo?".
Como todo artista comprometido, sus obras generan adhesiones y críticas. Como la obra en la pared de una clínica de enfermedades sexuales, que el ayuntamiento decidió no borrar; en la que un hombre desnudo cuelga de la ventana de una mujer infiel.
17 de septiembre de 2009
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